Fue Antonio Calderón quién, algún tiempo después de conocernos, me presentó a un curioso personaje que pertenecía a su grupo de contacto, y que, según me contó, había tenido encuentros con extraterrestres. Se trata de José María Díaz Reiné, un hombre que había dejado por escrito el resultado de sus experiencias en diferentes publicaciones de autor. Su historia, cierta o no, me resultó interesante y singular.