No soy muy de indagar en casos excesivamente trillados, pero en un par de ocasiones, en la compañía de Alberto Guzmán (Edenex), visité las Caras de Bélmez para sorprenderme con uno de los mayores enigmas de todos los tiempos.
UNA VIDA DEDICADA AL MISTERIO, LA MÚSICA Y LA LITERATURA
No soy muy de indagar en casos excesivamente trillados, pero en un par de ocasiones, en la compañía de Alberto Guzmán (Edenex), visité las Caras de Bélmez para sorprenderme con uno de los mayores enigmas de todos los tiempos.